El secretario de Sociedad Civil de Podemos, Luigi Carinci, cree que las promesas de López Miras y Luengo con los bomberos “no aportan nada nuevo”, porque “son los mismos compromisos que el Gobierno regional firmó con los representantes de los trabajadores en enero y que seis meses después siguen sin cumplirse”

El gobierno regional volvió ayer a comprometerse ayer por enésima vez a sacar nuevas plazas de bomberos, publicando las bases de la oferta de empleo de 2022 y unificando esta convocatoria con la de 2021, así como al pago de las horas extra atrasadas. Desde Podemos, el secretario de Sociedad Civil, Luigi Carinci, ha valorado con cautela este nuevo anuncio, ya que “son los mismos compromisos que el gobierno regional firmó con los representantes de los trabajadores en enero y que seis meses después siguen sin cumplirse”, por lo que cree que “lo que hace falta son hechos y no más palabras”.

Seguimos con parques cerrados y otros bajo mínimo por la falta de bomberos.
El Gobierno Regional sigue retrasando la ampliación de las plazas necesarias para garantizar el servicio de Extinción de Incendios.
Mientras los bomberos se juegan la vida en cada emergencia!! https://t.co/gBRUNh36GR

— Luigi Carinci (@Luigi_Carinci) July 7, 2022

La demora a la hora de reforzar el servicio de bomberos, está provocando, asegura Carinci, que “mientras tanto estemos viviendo una situación muy peligrosa, con una falta de efectivos generalizada en todos los parques”. El dirigente morado pone como ejemplo la situación vivida el pasado viernes, “donde solo había un cabo en el parque de Yecla y otro en el de Jumilla”, parques que deben cubrir un área muy extensa sin apenas personal.

Para Luigi Carinci, la consecuencia de toda esta situación, que califica de “desidia” es que “se está jugando con la seguridad de nuestros bomberos y de la población en general”. Desde la formación morada han seguido con “enorme preocupación” las últimas actuaciones de los bomberos, como la del pasado martes en La Manga, donde un hombre resultó herido en un incendio de gran virulencia, para cuya extinción solo había dos bomberos disponibles. “Dios no quiera que ocurra una tragedia en plena temporada turística”, concluye Carinci, “pero se están dando todas las circunstancias para que así sea y el único responsable es el gobierno de la Región de Murcia”.