Óscar Urralburu Arza. Secretario General y portavoz en la Asamblea regional.

Comienza el curso y la Consejera de Educación ha cometido el mismo error que todos sus predecesores, decir que todo está bien, que el curso ha comenzado con normalidad mientras profundizaba en la política de recortes. Al más puro estilo «Wert».

Pero la comunidad educativa Plataforma en Defensa de la Escuela Pública, que integra a los agentes que participan en el proceso educativo dentro del sector público, AMPAS, estudiantes y profesorado, no comparten esta opinión y se han puesto de acuerdo para pedir la reprobación de la Consejera de Educación en la Asamblea Regional.

Por faltar a la verdad, por no evidenciar los problemas y retrasos en la adjudicación del profesorado, que en algunos casos han tardado más de 20 días en llegar a los centros educativos. Por no reconocer el mal estado de los centros de la red pública. Por el caos sembrado con las reválidas y las pruebas de diagnóstico. Pero, sobre todo, por no reconocer que los recortes vuelven un curso más. Vuelven con la saturación generalizada de las aulas, con grupos de más de 36 alumnos y alumnas en ESO y más de 40 en Bachillerato, algo que no se veía desde la década de los 80.

Vuelven precarizando al profesorado y dificultando en extremo las condiciones en las que realiza su trabajo con el incremento de horas lectivas, la reducción de las horas de Orientación Educativa o de Atención a la Diversidad. Vuelven con la reducción de los desdobles en la FP y en los grupos bilingües y vuelven con el incremento de esos contenedores que llaman aulas prefabricadas.

Vuelven con la reducción de las unidades de infantil, primaria, secundaria y módulos de FP en la red pública mientras se amplían en la concertada y se subvenciona directamente centros privados en enseñanzas no obligatorias. Vuelven a través de la manipulación de los presupuestos para no pagar más becas para libros, material escolar o comedores escolares. Vuelven, en definitiva, en la forma de esa desobediencia constante a las decisiones democráticas de la Asamblea Regional y por el empeño de aplicar de modo radical la LOMCE, mientras se defiende la necesidad de un Pacto Social por la Educación en la Región que a nadie engaña.

La Sra. Sánchez Mora, ha conseguido poner de acuerdo a mucha gente distinta bajo la idea de que no la quieren dirigiendo la Educación regional y como ocurrió con el exministro Wert va a ser reprobada. Ha conseguido que la mayoría de cámara legislativa regional no confíe en su trabajo.

Nuestro sistema público educativo regional se encuentra en una situación de depresión grave y preocupante. Y esto no es una falsa alarma, es la conclusión a la que ha llegado la plataforma en Defensa de la Escuela Pública, conclusión que desde PODEMOS compartimos: “sobran los motivos para pedir la reprobación de la Sra. Consejera y la de su Director General de Planificación. La Región de Murcia no merece ni más mentiras ni más incompetencia y precisa de forma urgente frenar el deterioro de la educación pública. Nos jugamos mucho y el futuro de nuestros hijos e hijas no puede estar en tan malas manos.”

Artículo publicado originalmente en LaVerdad el 13/10/2016.

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