La portavoz regional de Podemos, María Marín, pide al Presidente regional “un paso al frente” para “desmarcarse de los violentos” y asegura que “no basta condenar este ataque en Lorca con la boca pequeña”

El asalto al pleno del Ayuntamiento de Lorca protagonizado ayer por la patronal de la ganadería intensiva y alentado por Partido Popular y Vox durante la última semana debe ser el detonante para la ruptura de los acuerdos de López Miras con la ultraderecha. Así lo ha considerado esta mañana la portavoz regional de Podemos, María Marín, quien ha visitado esta mañana la localidad lorquina para solidarizarse con el Grupo Municipal de Izquierda Unida en Lorca y con los ciudadanos y ciudadanas de Lorca, “una ciudad acogedora que no se merece la imagen que ayer unos pocos dieron a toda España”. Además, Marín ha tenido palabras de apoyo para los ganaderos “que hacen las cosas bien, que son la mayoría y a los que la banda que asaltó ayer el ayuntamiento no representan de ningún modo”.

‼️Muy grave. La patronal ganadera de #Lorca asalta el Ayuntamiento de aquella ciudad para impedir que los representantes democráticas aprueben medidas para reducir el impacto de las macrogranjas.

PP y VOX han alentado este asalto a la instituciones al más puro estilo trumpista. pic.twitter.com/sQruD12zOG

— Javier Sánchez Serna (@J_Sanchez_Serna) January 31, 2022

Para Marín, la democracia se encuentra en un momento crítico, “el más grave desde la transición”. La portavoz de Podemos ha recordado que en los últimos meses se ha pasado “de las pintadas y las pedradas, a los ataques con cócteles molotov”. Ayer se produjo un nuevo paso en esta escalada con “un asalto al más puro estilo Trump”. Marín ha asegurado que López Miras debe ser “el primero en dar un paso al frente para desmarcarse de los violentos” y le ha afeado que haya condenado este ataque “tarde y con la boca pequeña”. La diputada morada ha exigido la destitución del portavoz del Partido Popular en Lorca, Fulgencio Gil, y la ruptura de todos los acuerdos en la Asamblea Regional con Vox, “un partido que celebra este tipo de asaltos” y destituir a la consejera de ultraderecha. Para Podemos, es imprescindible que López Miras aclare “hoy mismo si está con los demócratas o está con los matones”.

El Ayuntamiento de Lorca lleva más de un año dialogando sobre cómo limitar la distancia de las macrogranjas respecto a los núcleos urbanos. La normativa aprobada no afecta a las granjas legales. Usted está justificando la violencia mintiendo cuando dice que no hay consenso. https://t.co/g2nVb5VpSa pic.twitter.com/RAwAYpDMkK

— María Marín (@MariaMarinMart) January 31, 2022

La diputada de Podemos ha denunciado que, además de los responsables directos del “asalto trumpista”, entre los que había “pocos ganaderos y muchos elementos de extrema derecha”, este ataque “es la consecuencia de un clima irrespirable alimentado por la oposición de Vox y del Partido Popular”. La portavoz ha recordado que el asalto “comenzó con un bulo”. difundido por el PP el 3 de enero sobre unas supuestas declaraciones de Garzón, “que fueron manipuladas para convertir al ministro en cabeza de turco y lanzar la campaña electoral en Castilla y León”, es decir, “por puro electoralismo”. A partir de ese momento la, para Marín “la cronología es clara”, ya que cuatro días después, el 7 de enero, una delegación del PP encabezada por la diputada nacional Isabel Borrego y el senador Francisco Bernabé “estaba en Lorca para meter cizaña”. A ellos se sumó días después el presidente autonómico de Vox, José Ángel Antelo, quien visitó el municipio el 20 de enero “echando aún más gasolina a la hoguera”. Además, también el exministro del Interior y eurodiputado del PP, Juan Ignacio Zoido, “visitó Lorca el pasado jueves para prender la mecha”, algo que ha continuado durante todo el fin de semana con cargos locales de Vox como Carmen Menduiña y del PP como el exalcalde Fulgencio Gil, quienes “siguieron con las declaraciones incendiarias”.

Marín ha señalado además que entre los manifestantes concentrados a las puertas del Ayuntamiento para impedir la celebración del Pleno “había diputados del PP y de Vox y dos alcaldesas del PP” y se ha preguntado qué ocurriría si incidentes como el de ayer se repitiesen “en la Asamblea Regional, en Puerto Lumbreras o en Fuente Álamo cada vez que un grupo de personas está descontento con una decisión”. Para la diputada, esta actitud constituye un hecho muy grave que demuestra que la democracia en la Región de Murcia “está siendo asaltada por un partido que se sitúa al margen de la democracia” y cuyo máximo dirigente en la Región de Murcia, José Ángel Antelo, “celebraba ayer en redes sociales este ataque”. Marín ha cargado contra Vox y ha recordado que no estamos ante una fuerza democrática, sino ante “un fascista cuyo único objetivo, como demostraron ayer, es destruir nuestra democracia desde dentro”. Algo para lo que desde Podemos consideran que “tienen a un aliado imprescindible en el PP”, un partido “entregado a la deriva suicida de Casado, al que todo le vale para alcanzar el poder”.

Por su parte, Gloria Martín concejala de Izquierda Unida en el Ayuntamiento de Lorca, ha repasado la moción que iba a aprobarse ayer y ha recordado que la inmensa mayoría de la legislación aplicable a las infraestructuras ganaderas “proviene en su mayoría de la Comunidad Autónoma”. Martín ha asegurado además que la moción “contaba con el visto bueno de todos los actores implicados hasta que se empezaron a lanzar bulos”.

Por último, el coordinador regional de Izquierda Unida Verdes, José Luis Álvarez Castellanos ha considerado que el asalto al Pleno del Ayuntamiento de Lorca “es intolerable”, mientras que ha calificado como “un disparate que socava los principios más elementales de la democracia” el apoyo de PP y Vox a esta acción violenta.. Álvarez Castellanos ha asegurado además que PP y Vox “saben perfectamente que la modificación propuesta no afecta a las explotaciones porcinas legalmente existentes y sí a las ampliaciones de estas o las nuevas explotaciones”. Además, el coordinador de IU ha recordado que el PP “ha apoyado medidas más restrictivas en otros ayuntamientos”, como los 2.500 metros de distancia mínima a suelo urbano en Cieza, “que se elevan hasta 4.000 metros de distancia mínima en Moratalla”, mientras que en Yecla “es el propio gobierno municipal del PP el que impulsa una medida similar”.