María Marín, portavoz regional y candidata a las elecciones autonómicas, asegura que determinados partidos y organizaciones agrarias “parecen más interesados en crear confrontación con este tema y sacar rédito político, que en solucionar los verdaderos problemas de nuestra agricultura”

Trasvase sí, pero con la vista puesta en un futuro en el que el cambio climático haga que la desertificación avance, dejando sin capacidad también otras cuencas hídricas. Ese es el planteamiento de Podemos sobre el acueducto Tajo-Segura. La portavoz morada, María Marín, ha exigido a los partidos políticos que dejen de utilizar este tema como un arma arrojadiza para sacar votos y tomen medidas urgentes para llevar el sector agrícola regional a un modelo más eficiente.

La diputada autonómica ha señalado que España vivió en 2022 “el año más cálido” desde que comenzaron los registros en 1916, siendo además el tercer año hidrológico más seco de la historia. De hecho, tal y como ha destacado Marín, los embalses se encuentran en este momento “a menos de la mitad de su capacidad y en el nivel más bajo desde 1995”.

La portavoz de Podemos ha asegurado que ante este panorama, existen dos alternativas. La primera sería “cerrar los ojos a la realidad y continuar con un discurso negacionista”, mientras que la apuesta de Podemos es “aceptar que el cambio climático ya está aquí y que debemos adaptarnos”. Marín ha apoyado explícitamente el futuro del trasvase, al tiempo que ha señalado que desde su formación son “conscientes de que las aportaciones de otras cuencas se van a ir reduciendo”, por lo que hay que trabajar “también en mejorar la sostenibilidad de nuestra agricultura, transitar hacia cultivos más eficientes, reducir la contaminación por nitratos y apostar por otros recursos hídricos complementarios como puede ser el agua desalada”.

Marín ha lamentado que desde partidos políticos como el PP, Vox o el PSRM se esté alentando un discurso de confrontación. La diputada ha criticado que en la manifestación de hoy en Madrid vaya a haber “más políticos, incluidos los representantes de algunos sindicatos de regantes y de algunas organizaciones agrarias que agricultores reales”, que parecen “más interesados en crear confrontación con este tema y sacar rédito político, que en solucionar los verdaderos problemas de nuestra agricultura”. Por último, la portavoz de Podemos ha recordado que Partido Popular y Vox, a pesar de presumir de defender a la agricultura, votaron en contra de la ley aprobada por el Gobierno sobre la cadena alimentaria para acabar con la venta por debajo del precio de producción. “Utilizan el campo como arma arrojadiza, pero a la hora de la verdad, lo único que defienden es el derecho de las grandes multinacionales a explotar a los trabajadores, a degradar el territorio con métodos muy contaminantes y a extorsionar a los pequeños propietarios”, ha concluido.