Podemos pide un Plan Regional de Prevención del Suicidio

La diputada regional, María Ángeles García Navarro, ha presentado una moción en la Asamblea Regional para que desarrolle este plan. Sería a través de la Consejería de Salud, en coordinación con Educación y Familia y la colaboración de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, policía local, Fiscalía, jueces así como el Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses.

El Plan que exige Podemos es un paquete de medidas para prestar especial atención a las conductas suicidas. Según ha explicado García Navarro, se deben contemplar “políticas y programas concretos, que aborden el proceso terapéutico y de recuperación de las personas, con especial incidencia en la población adolescente e infantil así como de personas mayores. Se deben establecer pautas prácticas de actuación a educadores, familiares, agentes sociales, cuidadores y profesionales sanitarios”.

Por otro lado, la diputada del Grupo Parlamentario Podemos pedirá el apoyo del resto de grupos de la Asamblea Regional que se realice una estadística y difusión de la información veraz y científica que “permita la disminución del estigma asociado al suicidio, que contemple también la formación de profesionales y apueste por la investigación epidemiológica”.

María Ángeles García Navarro ha detallado que en la Región de Murcia en 2015, el Centro Regional de Estadística 109 personas fallecieron como consecuencia de suicidio, 80 hombres y 29 mujeres, lo que supone una media de 2 suicidios a la semana. Es por tanto, un problema “de salud pública que no se está tratando como tal”.

A esto hay que añadir, ha dicho la diputada de Podemos, que la Región de Murcia presenta una tasa de suicidios por 100.000 habitantes particularmente alta en varones jóvenes, ya que “doblamos la tasa estatal al situarnos en un 12,51%”.

De ahí que Podemos se haya decidido a presentar una moción, puesto que como ha explicado García Navarro, “es necesario romper el silencio en torno a este problema de salud pública para el éxito de los programas de prevención con la comunicación apropiada de información y la sensibilización del problema. Las propuestas deben dirigirse a aumentar nuestro conocimiento, tanto de las conductas suicidas en nuestro entorno, como de los más eficaces protocolos de prevención. En los países en los que se han desarrollado políticas de prevención, las tasas de suicidio han descendido claramente”.