violencias machistas

Podemos exige al Partido Popular que ponga en marcha la Comisión especial de Igualdad y contra las Violencias Machistas

María Marín denuncia que la falta de iniciativas en prevención y atención a las víctimas durante la pandemia sitúa a la Región de Murcia como la comunidad autónoma que peores datos arroja

 

La Región de Murcia vuelve a situarse a la cabeza de una triste clasificación, la de las comunidades que más sufren la violencia de género. Así lo desvelaba ayer el Instituto Nacional de Estadística cuando hacía público que en la Comunidad Autónoma, 1.343 mujeres viven con protección policial, amenazadas y temiendo por su vida. Este dato supone que al menos 2 de cada 1.000 mujeres de la Región de Murcia viven bajo la amenaza de muerte del machismo, lo que entraña que una mujer tiene tres veces más posibilidades de sufrir violencia de género en la Región que en el País Vasco o en Cataluña.

Para la portavoz regional de Podemos, María Marín, los números publicados tienen explicación política, social e incluso económica, que se resume en la desidia de un Gobierno regional que no atiende lo suficiente a un problema tan grave como la violencia machista. En primer lugar, Marín asegura que “dar alas a los discursos de quienes niegan la existencia de la violencia de género y que criminaliza a las asociaciones feministas que denuncian esta situación y atienden a las víctimas.

La portavoz ha cargado contra la pretensión de la consejera de Educación procedente de Vox, Mabel Campuzano, de implantar la censura parental precisamente para contenidos relacionados con el género y contra la violencia, ya que “como sociedad, la única herramienta eficaz y definitiva para erradicar el machismo es la educación en igualdad, y este asunto no se trata de algo opcional que quede a discreción de las familias”. La diputada morada ha puesto como ejemplo a “un padre machista y maltratador”, que “nunca permitiría que sus hijos e hijas asistan a una charla en la que se les va a enseñar a identificar y a no tolerar la violencia machista”.

Por el contrario, Marín ha señalado que se trata de “contenidos obligatorios, impartidos por expertos y que son tremendamente útiles para desterrar comportamientos como el machismo, la homofobia o el racismo”, y ha recordado que “no existe el derecho a la discriminación, a la exclusión o a la marginación” porque “el respeto no es opcional”.

Además de los discursos de extrema derecha, la portavoz de Podemos ha señalado como una de las principales causas del aumento de los casos de violencia machista en la Región de Murcia a la “falta de iniciativas, de inversión e incluso de interés del Gobierno regional por afrontar este problema social”. Marín ha recordado que durante la pandemia se dispararon los datos y las denuncias como consecuencia directa del aumento del riesgo que supusieron tanto los confinamientos como la disminución del contacto social fuera del núcleo familiar. Sin embargo, a pesar de estos datos, la consejería ha estado completamente ausente, con una persona como Isabel Franco al frente, “más preocupada por mantener su cargo y cambiarse de partido a mitad de legislatura que en abordar los problemas que competen a su responsabilidad como consejera”.

Por último, Marín ha exigido a López Miras que ponga en marcha de una vez la Comisión Especial de Igualdad y contra las Violencias Machistas que Podemos propuso hace meses sin haber obtenido respuesta alguna. La portavoz morada ha denunciado que se trata de la primera legislatura desde que esta lacra tomó relevancia en la que la Asamblea Regional no cuenta con una mesa para abordar y legislar sobre este tema. “Necesitamos poner todas las herramientas a disposición de las víctimas, perseguir a los agresores y formar a las próximas generaciones en valores que destierren el machismo de nuestra sociedad”, ha concluido Marín.