La portavoz regional de la formación, María Marín, asegura que defender la agricultura y la ganadería es “actuar contra aquellos que se saltan la ley, contaminan nuestros suelos, roban agua para sus regadíos ilegales y manchan la imagen de estos sectores”

María Marín, portavoz de Podemos en la Asamblea Regional, preguntará esta mañana durante el pleno de la cámara autonómica acerca de las inspecciones llevadas a cabo en las macrogranjas por parte de la Consejería de Agricultura y Medio Ambiente y sobre las medidas que va a poner en marcha para garantizar que estas instalaciones cumplan a rajatabla con las normas medioambientales y de bienestar animal.

Según ha asegurado la portavoz, “en la Región de Murcia, los que contaminan siguen disfrutando de una total impunidad”, mientras que el consejero de Agricultura, Antonio Luengo, “mira hacia otro lado y niega la existencia de un grave problema que tiene consecuencias letales para nuestra tierra”.

No es la primera vez que Marín lleva a la tribuna de la Asamblea Regional el asunto de las macrogranjas. Hace sólo tres semanas, la portavoz de Podemos denunció con pruebas gráficas el absoluto descontrol de los vertidos de purines de algunas macrogranjas, mostrando en la cámara las imágenes de balsas sin impermeabilizar y terrenos muy deteriorados por la presencia de lodos contaminados.

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Balsas de purines, malos olores, tuberías de lodo cargado de excrementos vertiendo directamente sobre ramblas… Más de dos millones y medio de cerdos y más de 160 macrogranjas en 20 municipios. pic.twitter.com/A2x0AFs8Nk

— Podemos Región de Murcia (@podemosmurcia) February 9, 2022

El Gobierno de López Miras acusó a la portavoz morada de “estar mintiendo”, pero el Seprona de la Guardia Civil decidió seguir este hilo y dos días después iniciaron una operación que confirmó “graves irregularidades en varias explotaciones porcinas junto al Mar Menor, entre las que se encontraban balsas mal impermeabilizadas y lixiviados de residuos que contienen nitratos”, tal y como había advertido Marín.

Para la diputada morada, la operación de la Guardia Civil reveló que desde la Consejería de Agricultura y Medioambiente “no se estaba cumpliendo con la obligación de vigilar el cumplimiento de las leyes que rigen esta actividad”, motivo por el cual, Marín llevará de nuevo a la Asamblea Regional la exigencia de que se realicen las inspecciones necesarias desde la Consejería y se tomen medidas que garanticen que este tipo de instalaciones “cumplan a rajatabla con las normas medioambientales y de bienestar animal”.

Para la portavoz, es fundamental saber si el consejero Luengo pretende seguir tapando las irregularidades y si, por lo tanto, a la ciudadanía sólo le queda “el recurso a la justicia y la Guardia Civil frente a una administración autonómica que la ha abandonado y que prefiere garantizar los beneficios de las multinacionales antes que proteger los intereses de los vecinos y vecinas de la Región”. “Defender nuestra agricultura y nuestra ganadería es defenderla de aquellos que se saltan la ley, roban agua para sus regadíos ilegales y manchan la imagen del sector”, ha asegurado Marín.