Podemos denuncia que la “etiqueta sostenible” inventada por PP y PSRM supone el blanqueo de las prácticas contaminantes de la agroindustria

María Marín lamenta que socialistas y populares se hayan unido para rechazar la enmienda de los morados que implantaba, en su lugar, una etiqueta verde de reconocimiento a la agricultura ecológica

La Asamblea Regional ha rechazado esta tarde la creación de una etiqueta verde para potenciar productos procedentes de la agricultura ecológica del Mar Menor. La propuesta ha sido presentada por la portavoz de Podemos en la cámara autonómica, María Marín, mediante una enmienda a la moción del PSOE en la que se planteaba la creación de un “ecoetiquetado” que reconozca los productos de agricultura “sostenible”, un distintivo que, tal y como ha asegurado Marín, “no tiene ningún marco regulador, como si lo tiene la agricultura ecológica”. Se trataría por el contrario de “un invento” que ya se preveía en la mal llamada Ley de Recuperación y Protección del Mar Menor, y que supone para Podemos “un intento de blanquear las prácticas contaminantes de las grandes empresas de la agroindustria”.

La portavoz de Podemos ha destacado que “aunque la intención sin duda es buena, la concreción de la propuesta no aporta absolutamente nada al objetivo de lograr una agricultura respetuosa con el medio ambiente”. Marín ha señalado que coincide en la necesidad de un cambio del modelo productivo regional, «especialmente en torno al Mar Menor”, pero ha añadido que además “hay que reconocer el trabajo y el esfuerzo de los agricultores y ganaderos que están apostando por ese cambio y que hacen las cosas bien”. Frente al “término inventado y sin regulación” que han creado hoy el PSRM y el Gobierno regional, la portavoz de Podemos ha contrapuesto la etiqueta ecológica y ha recordado que el productor ecológico “debe cumplir con toda una serie de requisitos, establecidos por la normativa europea, cien por cien transparentes y conocidos por todos, que son además controlados por el Consejo de Agricultura Ecológica de la Región de Murcia”. Entre estos requisitos se encuentra el uso de prácticas de labranza y cultivo respetuosas con el suelo, la rotación de cultivos para que los recursos en el sitio se utilicen de manera eficiente, la restricción severa de pesticidas químicos, fertilizantes sintéticos y otras sustancias o la prohibición de utilizar organismos modificados genéticamente y de radiaciones ionizantes.

La agricultura sostenible, por el contrario, tal y como la contempla la mal llamada Ley de Recuperación y Protección del Mar Menor de 2020, según la diputada, es “un neologismo, un término de nuevo cuño que se incluyó en la ley por la presión del lobby de la agroindustria para blanquear sus prácticas contaminantes”. De hecho, para Marín, la “agricultura sostenible de precisión” es simplemente “una carta blanca para seguir utilizando fertilizantes y arrojándolos al Mar Menor”, ya que permitía verter hasta 170 kilos anuales por hectárea, “cuando el Mar Menor no aguanta ni un nitrato más”.

La portavoz de Podemos ha asegurado que las presiones del lobby de la agroindustria “tienen que ser enormes”. Un lobby al que la diputada ha identificado con la Fundación Ingenio, el patronato de las multinacionales del agronegocio. Marín ha recordado que “al mismo tiempo que aseguran promover esta agricultura sostenible” varios patronos de la Fundación “se encuentran entre los imputados por el caso Topillo por verter presuntamente cientos de miles de metros cúbicos de salmueras contaminadas al Mar Menor”.

Marín ha concluido su intervención apelando a los diputados y diputadas del PSRM a definir dónde quieren estar, si “apoyando al lobby de la agroindustria” o junto a “los vecinos y vecinas y movimientos sociales que luchan por el Mar Menor”. Por último, ha llamado a los grupos de la Cámara autonómica a apoyar la creación del Parque Regional del Mar Menor que Podemos ha registrado como proposición de ley en la Asamblea, algo que tendría como consecuencia que “en unos meses, los consumidores podrían encontrar en las estanterías de los supermercados productos ecológicos del Parque Regional del Mar Menor”. “Eso sí que es valor añadido. Eso sí que es impulsar la agricultura en la comarca. Ese sí que sería un mensaje de la Región al resto del mundo. Ese sí es un objetivo por el que merece la pena luchar”, ha finalizado Marín.