Las medidas económicas anunciadas son solo un lavado de imagen

El diputado regional de Podemos, Andrés Pedreño, ha afirmado valorado las medidas económicas anunciadas. Por un lado la extensión de la cuota cero a parados de larga duración, no supone creación de trabajo estable, y por otro, la anunciada rebaja del impuesto de sucesiones del PP desafía la progresividad del impuesto y beneficiaría más a los patrimonios más cuantiosos.

El diputado Andrés Pedreño se ha referido a la medida anunciada por el Presidente de la Región, de ampliar “la cuota cero” para autónomos a los parados de larga duración, esa medida supone para Pedreño un incentivo para el empleo autónomo, pero según afirma “tiene truco» porque la cuota reducida asciende a 50 euros durante 6 meses (si se aprueban los PGE), 110 euros durante los siguientes 6 meses, pero el Presidente de la Región no ha dicho por cuánto tiempo se subvencionaría a esos autónomos que son parados de larga duración, pero si la subvención es por 6 meses hablamos de 300 euros de apoyo a nuevos autónomos.

Además el diputado Regional de Podemos ha explicado que esta medida “es tan sólo propaganda para limpiar la imagen de PAS, en este contexto de crisis institucional” porque “extender la cuota cero de autónomos a los parados de larga duración no supone crear un empleo estable, ya que los emprendedores no sólo necesitan de un mecanismo para arrancar sino también para llevar sus negocios adelante cosa que esta medida no prevé”.

Por otro lado Pedreño también se ha referido a la anunciada bajada de impuestos de sucesiones y donaciones, y ha explicado que lo que el gobierno del PP está haciendo realmente, cuando afirma bajar los impuestos es aumentar el agujero del déficit, es “restar progresividad al impuesto bonificando a los pequeños patrimonios sin abordar problemas estructurales en el mismo como la excesiva penalización de los herederos colaterales y favorecer con una reducción lineal de la cuota a los grandes patrimonios, que ya de por sí gozan de armas de ingeniería fiscal para eludir el tributo”.

Esta legislatura ha venido marcada por una reducción drástica de ingresos por la vía de este impuesto. En 2017 está previsto que se ingresen 81,10 millones de euros, que se verán reducidos en 2018, lo cual conllevará un aumento del déficit o una reducción del gasto en servicios públicos esenciales, y todo ello inserto en un contexto de restricción presupuestaria fijada por Bruselas al gobierno estatal con exigencias de reducción del gasto por 8000 millones de euros, y ante la incapacidad de obtener avances en la prometida revisión del sistema de financiación autonómica.

Por lo tanto, ha concluido “si no diseñamos un impuesto que ponga a salvo de tributación a los patrimonios más bajos y refuerce la proporcionalidad del esfuerzo tributario entre las herencias más cuantiosas y las de menor relevancia seguiremos abocados a una región con déficit en la prestación de los servicios básicos del estado del bienestar”.

Así ha afirmado que “puede apreciarse en el dato de que tenemos la renta de inserción social más baja de todo el país”. Esto demuestra una vez más quienes son objeto de preocupación por parte del gobierno regional y quienes parecen no importarles.