Residencias

Es urgente revisar los conciertos y autorizaciones de aquellas residencias en las que se hayan cometido negligencias

La portavoz de Podemos en la Asamblea Regional asegura que López Miras “ha fallado estrepitosamente” y augura que “volverá a fallar si hay una nueva ola, mientras que vea en las residencias una oportunidad de hacer negocio y aumentar su red clientelar y no un servicio público fundamental”

La gestión de las residencias de mayores de la Región de Murcia ha vuelto a suscitar la polémica en la Asamblea Regional.

A pesar de que el pasado 14 de noviembre el Partido Popular aseguraba en los medios de comunicación que llevaría a la Junta de Portavoces de la cámara autonómica una moción para la creación de un Comité Técnico que analizase la situación de las residencias de mayores de la Región de Murcia, María Marín, portavoz de Podemos en la Asamblea, ha denunciado que “cuatro semanas después, seguimos esperando esa moción y seguramente nos darán las uvas”.

Para la diputada, a López Miras no le interesa que se escuche a los familiares y a los profesionales, porque tendrían mucho que decir”.

Marín ha recordado que el pasado 10 de noviembre, días antes de que el presidente anunciase a bombo y platillo su inexistente Comité Técnico, Podemos defendió en la Asamblea Regional la creación de una Comisión de Investigación en la que se diese audiencia a los familiares de los afectados y afectadas, a profesionales de las residencias de mayores, a sus gestores y a expertos en la materia.

La portavoz ha considerado que los diputados y diputadas que rechazaron la comisión “se han cubierto para siempre de una vergüenza que, ante la oleada de críticas, trataron de remediar con el anuncio de un comité técnico que nunca se puso en marcha”.

Los testimonios hechos públicos y los que siguen saliendo a la luz en los medios de comunicación “ponen los pelos de punta y exigen la mayor transparencia”, señala Marín, que además recuerda que existe una investigación de la fiscalía que ya está en marcha.

Marín ha recordado que la situación de las residencias no se debe sólo a la covid, sino que “la pandemia ha destapado muchas carencias que ya existían en la atención a nuestros mayores”.

La portavoz de Podemos ha apuntado que en los centros de la tercera edad han aparecido “deficiencias en las instalaciones, falta de personal y necesidad de una mejor formación”, que “deberían haber sido detectadas por el IMAS previamente” y que “sólo pueden explicarse o bien por la falta de medios y recursos humanos o bien por la falta de voluntad”.

La diputada ha apostado por revisar de forma urgente los conciertos y autorizaciones de aquellas residencias en las que se hayan cometido negligencias, en lugar de permitir que “sigan funcionando como si no hubiese ocurrido nada”.

Sin embargo, en una actitud que desde Podemos consideran “absolutamente incomprensible”, el PSOE ha rechazado aceptar una enmienda en este sentido, en “una clara cesión a la presión de la derecha y de los lobbies empresariales que ponen sus beneficios económicos por encima del bienestar de las personas mayores”.

Por otra parte, Marín ha considerado “un auténtico disparate” que en lugar de “impulsar una investigación y proteger a las personas mayores por encima de cualquier otra consideración, López Miras haya regado con cuatro millones de euros más a las empresas responsables de esta cuestionable gestión”.

Para la portavoz de Podemos, el sistema de conciertos y externalizaciones ha fallado estrepitosamente y volverá a fallar si hay una nueva ola, mientras el Gobierno regional vea en las residencias una oportunidad de hacer negocio y aumentar su red clientelar y no un servicio público fundamental.

Marín ha finalizado su intervención reclamando más plazas en residencias públicas en los próximos años, ya que mientras no haya “una verdadera alternativa pública a la red de conciertos, los fondos de inversión privados que manejan estos centros sabrán perfectamente que son la única opción y que, pase lo que pase, van a mantener su ocupación y su lucrativo negocio”.

“Tras toda una vida trabajando, nuestros mayores merecen más que eso, de igual forma que los trabajadores y trabajadoras de las residencias merecen otro modelo que prime la estabilidad y la calidad del empleo, por encima de los beneficios de un puñado de inversores”, ha concluido.