EL MAR MENOR COMO METÁFORA

María Marín durante el debate del estado de la Región de Murcia. 17 de junio de 2020.

Ayer le llevé al presidente de la Región un litro de agua del Mar Menor. Frente a los bulos y la propaganda de su discurso, nada mejor que la realidad sin filtros ni maquillaje. El Mar Menor tiene 2 millones de años. Hoy, después de 25 años de gobiernos populares, es una marea pestilente que conmueve a sus vecinos y espanta a nuestros visitantes.

El Mar Menor como metáfora. El estado de nuestra laguna es solo el máximo exponente, pero se mire por donde se mire ese es el estado de la Región de Murcia: descomposición, podredumbre… un hedor insoportable. A la cola en empleo. 3.500 personas más en el paro en 2019, 15.200 en el último trimestre, mientras en el conjunto de España se reducía en 112.400 personas.

A la cola también en cobertura social. Irrelevante. Esa es la nota que nos da la Asociación de Directores y Gerentes de Servicios Sociales en su último informe. 273.000 personas estancadas en el «pantano» de la pobreza, según el último informe FOESSA de Cáritas diocesana. De ellas, menos de 5.000 recibían en mayo la renta básica de inserción regional, tras un recorte de casi dos millones de euros aprobado en plena pandemia. Recortes criminales cuando 4 de cada 10 niñas y niños están en riesgo de pobreza en la Región de Murcia.

A la cola en inversión por alumno en centros de educación pública, donde tenemos la quinta mayor ratio de alumnos por aula. ¿Cómo va a garantizar el gobierno regional la distancia de seguridad de nuestros menores en unos centros hacinados? Ahora afloran todas las carencias y recortes de los últimos años.

Pero si hay un ámbito que nos preocupa, ése es el sanitario. Murcia se ha librado esta vez de lo peor de la pandemia, pero no estamos vacunados frente a un posible rebrote. Apenas tenemos 115 camas de UCI para 1,2 millones de personas adultas. 5 años sin abrir el Rosell y prometiendo una UCI en Caravaca, ésa que nunca llegó. Listas de espera que ya antes de la pandemia eran interminables. Años reclamando el refuerzo de la atención primaria, sin resultados.

López Miras ha querido vendernos que el éxito murciano se debe a su clarividencia: Murcia se anticipó a la pandemia y ya en febrero adelantó las compras de material sanitario. Hoy sabemos, dos meses después de haber solicitado esa información clave, que el Servicio Murciano de Salud apenas disponía de 5.000 mascarillas de protección el 14 de marzo, cuando se declaró el estado de alarma, cuando las necesidades del SMS son de 100.000 mascarillas semanales.

López Miras ha aprovechado esta pandemia para intoxicar gravemente a la opinión pública. Bulos. Opacidad. Contaminación. Pestilencia. El Mar Menor como metáfora de un gobierno regional podrido.

Publicado en el diario La Verdad de Murcia.